Piedras pintadas y Mini Jardín.

He aquí una manualidad para las tardes aburridas de frío y lluvia. Se trata de pintar piedras con los peques dando nosotros los últimos detalles si es necesario. Los materiales necesarios: solo piedras, pinturas acrílicas e imaginación. Barato, fácil y divertido, ¿verdad?.
La idea puede tener muchos usos: pisa-papeles, sujeta puertas, etc.
Esta se convirtió en una casita, pues tenía todo el aspecto de una casa sin pintar con su tejado a dos aguas.
Una vez  secó la pintura, hicimos un mini-jardín con un par de  plantas (Hawortias y Crásulas ovatas), que  no crecen muy rápido y las cuales, por cierto, parecen contentas compartiendo la maceta con la casita  ;) .